La sociedad actual vive un acelerado desbordamiento hacia la inmediatez de las cosas, la sobreestimulación de la tecnología y el atiborramiento hacia espacios comerciales o conocidos, provocando en algunas personas una desconexión por el presente estrés y ansiedad.
La mente, constantemente bombardeada por estímulos externos, tiende a divagar hacia el pasado o el futuro, generando estrés y ansiedad. ¿Cómo recuperar la calma y disfrutar plenamente del momento presente? Acá en Siu Esencias Florales te explicamos porque pasa esto y como las flores, pueden ayudarnos a salir de este estado.
El peso del pasado y la ansiedad por el futuro La mente humana tiene una tendencia natural a rumiar sobre experiencias pasadas o a
anticipar eventos futuros. Estos pensamientos recurrentes pueden generar un estado de estrés crónico que afecta nuestra salud física y mental. El pasado, con sus arrepentimientos y fracasos, y el futuro, con sus incertidumbres y miedos, nos impiden vivir plenamente el aquí y ahora.
El poder del presente
El presente es el único momento que tenemos realmente. Es en este instante donde se construye nuestra realidad y donde podemos experimentar la felicidad y la paz interior. Al vivir en el presente, somos más conscientes de nuestras sensaciones, emociones y pensamientos, lo que nos permite tomar decisiones más conscientes y alineadas con nuestros valores.
Las esencias florales: un camino hacia el bienestar emocional
Las esencias florales son preparados naturales obtenidos a partir de flores silvestres, que actúan a nivel energético sobre nuestras emociones. Cada flor posee una vibración única capaz de restablecer el equilibrio emocional y promover el bienestar.
¿Cómo pueden ayudar las esencias florales a vivir el presente?
Calman la mente: Algunas esencias florales, como la pasiflora o la valeriana, tienen propiedades calmantes que ayudan a reducir la ansiedad y la inquietud mental, permitiendo así centrar la atención en el momento presente.
Disminuyen el estrés: El estrés crónico puede generar una sensación de agotamiento y desasosiego. Esencias como el olivo o el castaño blanco pueden ayudar a restaurar la energía vital y a fortalecer el sistema nervioso.
Fomentan la paciencia: La impaciencia es un obstáculo para vivir el presente. Esencias como la impatiens pueden ayudar a desarrollar la paciencia y la
tolerancia, permitiendo así disfrutar de cada momento.
Aumentan la conciencia: Algunas esencias florales, como la clematis, favorecen la conexión con el cuerpo y las sensaciones presentes, lo que permite vivir el momento con mayor intensidad. Esencias florales que te ayudan con el desinterés actual.
Clemátide: Para las personas soñadoras o inconscientes o con un exceso de fantasía, que no viven con los pies en la tierra. Son personas de sueño pesado y despertar difícil. Ayuda a conectarse con el presente y a superar la falta de concentración. Desean la muerte con la esperanza de una vida mejor o de reencontrarse con un ser querido fallecido.
Madre selva: Para las personas nostálgicas que tienden a vivir en el pasado. Útil en los procesos del anciano. Ayuda en la soledad de aquellos que no los motiva el presente por estar permanentemente en un pasado añorado. Es especialmente recomendada para personas de la tercera edad.
Rosa Silvestre: Para personas desmotivadas, indiferentes o con falta de vitalidad. Ayuda a superar la apatía y la resignación. Introduce un elemento de fe y esperanza, dándole sentido a su existencia. Es útil cuando otras esencias similares no actúan según lo esperado. Ante la muerte próxima ayuda en la conciencia de la transformación.
Olivo: Ayuda a recuperarse después de sufrimientos severos y extremos. Permite recobrar ánimo y fuerza cuando se han agotado las reservas físicas y mentales (fatiga crónica). Útil luego de enfermedades prolongadas, durante la lactancia o varias noches de insomnio.
Castaño blanco: Para personas agobiadas por pensamientos indeseados persistentes. Ayuda a alejar las preocupaciones mentales excesivas y los
pensamientos reiterativos. Favorece el control del pensamiento para lograr un estado mental equilibrado. Es ideal para tratar el insomnio causado por la sobrecarga mental o el sueño no reparador por excesivos ensueños al dormir.
Mostaza: Para los estados depresivos y de melancolía fluctuante durante los que es imposible gozar de la vida y disfrutar lo que antes era motivante. Útil en los casos de tristeza y desesperación que no tienen causa conocida y son engendrados por el propio individuo.
Brote de castaño: Para quienes repiten siempre los mismos errores y no aprenden de las experiencias; que tienen problemas de aprendizaje, falta de memoria y/o déficit de atención. Ayuda a despertar el interés, amplía la capacidad de observación, asimilación y atención, lo que favorece la memoria.
Cómo elegir y utilizar las esencias florales
La elección de las esencias florales adecuadas dependerá de las emociones y necesidades individuales de cada persona. Es recomendable consultar a un terapeuta floral para recibir una orientación personalizada. Las esencias florales se pueden tomar de forma sublingual, diluidas en agua, o agregadas
a cremas o aceites esenciales para uso tópico. La frecuencia y la duración del tratamiento también varían según cada caso.
Más allá de las esencias florales: otras herramientas para vivir el presente. El uso de esencias florales puede ser un complemento valioso para otras prácticas que favorecen la conexión con el presente, como:
La meditación: La meditación permite entrenar la mente para centrarse en el momento presente y reducir la divagación mental.
La respiración consciente: La respiración profunda y consciente ayuda a calmar la mente y a reducir el estrés.
La práctica de yoga y tai chi: Estas disciplinas combinan movimiento y respiración, favoreciendo la relajación y la conciencia corporal.
La conexión con la naturaleza: Pasar tiempo en la naturaleza puede ayudar a reducir el estrés y a apreciar la belleza del momento presente.
Conclusión
Vivir en el presente es un regalo que podemos darnos a nosotros mismos. Las esencias florales, combinadas con otras prácticas, pueden ser una herramienta valiosa para reducir el estrés, la ansiedad y la desconexión, permitiéndonos disfrutar plenamente de cada momento de nuestra vida.